miércoles, 25 de febrero de 2009

Camino de Centro Europa

Pues nada, que tras una semana ausente de estos mundos por razones que desconozco (supongo que vagancia la primera de ellas), les comunico otra ausencia semanal.

Mañana me voy a conocer Viena, Budapest y Praga.

Se me presentó la oportunidad y la cogí al vuelo. Y como de algo se aprende en todos los viajes, espero conocer un poquito más de este mundo tan inmenso en el que vivimos, y espero que se me pegue algo de genios como Mozart, Sissi emperatriz, Gustav Klimt o el mismisimo Houdini.

Saludos

martes, 17 de febrero de 2009

Pensando en no pensar

Mi vida sin pensar en nadie es más fácil, hay menos complicaciones.

Pero pedirme que deje de pensar en alguien, es un aliciente para no quitarle de mi pensamiento.

Dejemos que el tiempo me muestre la luz al final del camino.

jueves, 12 de febrero de 2009

Carta para ti

Querido tú,

Hoy te escribo unas líneas que nunca leeras. Hoy te escribo para decirte lo que aún siento por ti. Aún te quiero. Aún espero a que un día vengas corriendo a mis brazos, a que me salves de la soledad de mis noches a solas con la almohada. Vivo con los pies en la tierra, pero con la cabeza en las nubes.

Sabes que por ti haría mil cosas, más de las cien que ya he hecho. Que no puedo evitar que me hagas sonreír cada vez que veo tu cara. Cada vez que veo tu sonrisa. Cada vez que te veo.

Sé que en el fondo lo sabes, pero que el mismo día que lo supiste, decidiste enterrarlo y hacer como que nunca te dije nada. Salvamos nuestra amistad, y esta creció. Pero el precio fue matar a mi corazón. Un corazón que sigue latiendo porque tiene 7 vidas.

Cada historia de amor tuya es una punzada en mi corazón. Un colador que sigue latiendo. Que sigue intentando bombear la sangre que le queda para que mi cabeza siga en su sitio. Para que mi cerebro recuerde lo lejos que te tengo y lo imposible que es alcanzarte.

Lo sé desde que te conozco, que mi amor es imposible. Hoy lo sé más que nunca. También sé por quien late tu corazón, y que cada vez que te pido que deje de latir por ella, recuerdo como me tengo que pedir lo mismo a mi también.

En la vida siempre queremos a quien no nos ama, y pocas veces ese amor es recíproco. En nuestro caso nunca lo podrá ser. Ya me he resignado a aceptar mi papel de amiga. La eterna amiga.

Por eso sé, hoy más que nunca, que tengo que borrar tu nombre de mi corazón. Sé que cuesta, pero también sé que no es imposible. Sólo hace falta voluntad. Y esta vez, espero que para sacrificar un corazón, no haga falta sacrificar una amistad. He vivido bastantes sacrificios en esta vida, y espero haber aprendido algo de todos ellos.

Hoy es mi último te quiero. El último que te digo. Y el que nunca leerás. Hasta que no cambie los matices de mis te quieros, no te los podré volver a decir. Seguiremos caminando juntos, por los caminos diferentes que nos corresponden. Hoy pretendo levantar la valla que nos separa, cada día un poco más. Pero mi voz siempre estará al otro lado. Mi apoyo seguirá ahí. Pero no quiero que veas las lágrimas que derramo mientras borro tu nombre de mi corazón. No quiero que sepas lo que sufro por no tenerte. Quiero pensar por una vez en mí, y descubrir que no todo está perdido, que en la vida habrá más nombres para mi corazón. Pero no quiero que veas como te borro. Eso ya lo descubrirás por ti mismo, pero conmigo a tu lado.

Algún día recordaremos esto y nos reíremos juntos. Algún día recordaré la de estupideces que he podido decir en tu nombre. Algún día me burlaré de las lágrimas que hoy corren por mi cara. Algún día ...

Hasta entonces, hasta aquí he llegado. Seguimos juntos, pero mi corazón te dice hoy adiós.

Te quiero

Propósitos de año nuevo para marzo

Tras el final de los examenes, el cuerpo me pide más que nunca dos propósitos.

El primero es uno que me lleva persiguiendo durante mucho tiempo, casi casi diría que desde que tengo ordenador. Necesito ordenar todos los archivos. Pasar las cosas a discos y dvd's. Clasificar fotos. Borrar todo lo que no valga. Hacer limpieza para poder formatear el ordenador. La simple idea de tener que hacerlo me aterroriza, pero aquí mi pequeño compañero, con unos 2 años y medio de vida, pide a gritos que lo limpie, que le quite virus y que lo acondiciones para que siga funcionando durante mucho tiempo más.

El otro gran propósito es adelgazar. Algo que muchas mujeres decimos y pocas cumplen. No es que en estos momentos me encuentre muy gorda, o al menos eso creo yo. Pero a la hora de vestir me lo noto. Y tampoco pretendo dejar de comer. Tan sólo intentar hacer más ejercicio, comer más saludable y dejar de comer mierdas varias entre horas.

Asi que voy a ver si me pongo con el primer propósito poco a poco, y el segundo lo dejo para marzo o así, y mientras ir cuidando los pequeños vicios de quiosco y similares.

Sé que a muchos no les interesa lo más mínimo lo que acabo de contar, pero quizá si lo escribo y alguien me toma la palabra, me anime más a hacerlo.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Castigada

No me puedo permitir el lujo de pensar en cuentos con finales felices.
Y es que tengo que aprender que no soy la Cenicienta, que mi papel en el cuento es otro.
Que no puedo ser princesa, que como mucho llego a plebeya.
Que el amor se irá con las protagonistas, pero a las secundarias nunca vendrá a buscarnos el príncipe azul.

Y será mi gran castigo.
Ver parejas felices a mi lado.
Y yo quedarme en la cama llorando por lo que no ha pasado.

lunes, 9 de febrero de 2009

Que será, será ...

Quiere Washington Estar Rodeada, Tripulada Y Usurpada Infelizmente;
Ondeando Pancartas Alegres Sobre Derechos Fidedignos;
Generando Hordas Jóvenes, Klimt Logrando Ñoñerías,
Zombies Xenófobos Componiendo Vals,
Ballenas Nadando Mares.

Aparentemente, meras líneas sin sentido. Pero quién de con la solución al acertijo, se lleva el premio*.


*: cuando digo el premio me refiero a una forma de hablar. Mi economía estudiantil no me permite regalar nada más que un aplauso y una sonrisa. Que se de con eso por satisfecho.

lunes, 2 de febrero de 2009

Guardando fotos ...

No es que quiera olvidar el pasado ... pero creo que a ciertas partes de mi habitación les hace falta un lavado de cara.

Quitar viejas fotos. No tirarlas, simplemente guardarlas. Y hacer sitio a nuevas fotos.

Porque me parece muy injusto por mi parte no tener fotos de aquellas personas a las que quiero en mis paredes o en mi corcho.

Porque a veces hay que afrontar que el pasado, pasado es, y que hay que seguir adelante con nuevas fotos y nuevas historias.

domingo, 1 de febrero de 2009

Envía amor al 5492

Ya estamos en Febrero. Mes de los examenes por excelencia ... y mes del amor.

Porque a mediados de mes, el famoso día 14, nos recuerda a un santo: a San Valentín.

Lo queramos o no, todos sabemos que es el día del amor. Lo celebremos o no, somos conscientes de los regalos que la gente que se quiere se hace. Lo queramos o no, es una fecha más a recordar del calendario.

No les quiero hablar hoy ni del santo en cuestión, ni del consumismo que ese día genera ni de cómo la gente sin pareja aborrece tanto ese día. No. Quiero hablar de lo que se supone que hemos de celebrar: el amor.

Esta noche estuve viendo la televisión. Era de madrugada, y en un momento de anuncios, la tele comenzó a bombardearme con mensajes del tipo "envía la palabra amor al 558822 y encontrarás a tu media naranja". O "hay más gente que busca a gente como tú". O "a qué esperas para encontrar al amor de tu vida".

Tras visionar una decena de estos anuncios, a una le da por pensar en muchas cosas. ¿Realmente la soltería le hace llegar a uno a los extremos insospechados de creer que a través de mandar un mensaje a una centralita encontrará al amor de su vida? Porque no estoy hablando de los anuncios que te venden pornografía, no. Hablo de los que te venden amor.

¿En serio hay tanta gente que cree que el amor tiene el precio de un mensaje de texto?

Ponerle precio al amor. Ponerle precio a un sentimiento. No echo la culpa a los vendedores pues, a fin de cuentas, es su trabajo. Le echo la culpa a aquellos consumidores que creen que el amor está a la venta.

Yo llevo años buscandolo, y hasta ahora no he encontrado que en ningún supermercado me lo ofreciesen a precio de oferta.

En definitiva, que estoy harta de que no dejen de venderme algo que no tiene precio. Harta de que me hagan ver que está al alcance de cualquiera cuando es una cosa de privilegiados.

Harta de que me vendan un sentimiento que hace tiempo que perdí ...