jueves, 12 de febrero de 2009

Carta para ti

Querido tú,

Hoy te escribo unas líneas que nunca leeras. Hoy te escribo para decirte lo que aún siento por ti. Aún te quiero. Aún espero a que un día vengas corriendo a mis brazos, a que me salves de la soledad de mis noches a solas con la almohada. Vivo con los pies en la tierra, pero con la cabeza en las nubes.

Sabes que por ti haría mil cosas, más de las cien que ya he hecho. Que no puedo evitar que me hagas sonreír cada vez que veo tu cara. Cada vez que veo tu sonrisa. Cada vez que te veo.

Sé que en el fondo lo sabes, pero que el mismo día que lo supiste, decidiste enterrarlo y hacer como que nunca te dije nada. Salvamos nuestra amistad, y esta creció. Pero el precio fue matar a mi corazón. Un corazón que sigue latiendo porque tiene 7 vidas.

Cada historia de amor tuya es una punzada en mi corazón. Un colador que sigue latiendo. Que sigue intentando bombear la sangre que le queda para que mi cabeza siga en su sitio. Para que mi cerebro recuerde lo lejos que te tengo y lo imposible que es alcanzarte.

Lo sé desde que te conozco, que mi amor es imposible. Hoy lo sé más que nunca. También sé por quien late tu corazón, y que cada vez que te pido que deje de latir por ella, recuerdo como me tengo que pedir lo mismo a mi también.

En la vida siempre queremos a quien no nos ama, y pocas veces ese amor es recíproco. En nuestro caso nunca lo podrá ser. Ya me he resignado a aceptar mi papel de amiga. La eterna amiga.

Por eso sé, hoy más que nunca, que tengo que borrar tu nombre de mi corazón. Sé que cuesta, pero también sé que no es imposible. Sólo hace falta voluntad. Y esta vez, espero que para sacrificar un corazón, no haga falta sacrificar una amistad. He vivido bastantes sacrificios en esta vida, y espero haber aprendido algo de todos ellos.

Hoy es mi último te quiero. El último que te digo. Y el que nunca leerás. Hasta que no cambie los matices de mis te quieros, no te los podré volver a decir. Seguiremos caminando juntos, por los caminos diferentes que nos corresponden. Hoy pretendo levantar la valla que nos separa, cada día un poco más. Pero mi voz siempre estará al otro lado. Mi apoyo seguirá ahí. Pero no quiero que veas las lágrimas que derramo mientras borro tu nombre de mi corazón. No quiero que sepas lo que sufro por no tenerte. Quiero pensar por una vez en mí, y descubrir que no todo está perdido, que en la vida habrá más nombres para mi corazón. Pero no quiero que veas como te borro. Eso ya lo descubrirás por ti mismo, pero conmigo a tu lado.

Algún día recordaremos esto y nos reíremos juntos. Algún día recordaré la de estupideces que he podido decir en tu nombre. Algún día me burlaré de las lágrimas que hoy corren por mi cara. Algún día ...

Hasta entonces, hasta aquí he llegado. Seguimos juntos, pero mi corazón te dice hoy adiós.

Te quiero

3 comentarios:

May dijo...

Jo, pues espero q se pase por aquí para leer tu carta. Q aunke es triste, es precioso lo q le escribes...

A veces el amor relega a la amistad a un 2º plano, pero esta tb puede depararnos cosas maravillosas.

Espero no q luches por dejar de llorar, sino q lo hagas por sonreir!

Muxos besos!!

Luis Cano Ruiz dijo...

Pedazo carta.Espero que la lea quien tiene que hacerla, porque estos comentarios sobran, si no llevan su nombre.

Un saludo.

Hakka dijo...

Es muy bonito...