lunes, 18 de mayo de 2009

Licores

El amor no está en el fondo de una copa,
ni en el ritmo de un reggaeton,
ni en un sábado noche,
ni en los labios de dos ebrios.

El amor es un licor que hay que tomar en copa y con hielos.
Un licor que cuesta conseguir.

Así que de momento, habrá que conformarse con chupitos de otro licor. Un sucedáneo que se hace pasar por amor, que vale para ese momento, pero que no es más que un sudoku para que se entretenga el corazón.

2 comentarios:

May dijo...

yo creo q es mejor no mezclar el amor con el alcohol, a no ser q sea del bueno...

Luis Cano Ruiz dijo...

Siguiendo el simil que has puesto, no creo que haya que conformarse con los chupitos. No conformarse. Simplemente es otra forma de beber, y como tal debes disfrutarla, aunque no sea lo último, sino sólo el preámbulo de una buena copa de Vino (ribera, por supuesto) y poniéndonos serios Ron (Matusalen, si se puede).

Un saludo. Cuídate.