lunes, 16 de marzo de 2009

Corazón de ceniza

Dicen que donde hubo llamas, siempre quedarán cenizas.

Y el que niege eso, es como aquel que rehuye de su pasado.

Mi corazón es ahora como un cenicero por donde han pasado multitud de cigarros. Unos dejaron las cenizas de una sola calada, otros la dejaron hasta que se consumieron enteros, unos pocos fueron grandes habanos que dejaron una huella que no se irá en mucho tiempo.

Hoy rebusco entre las cenizas de todos ellos, esperando encontrar los restos de mi antiguo corazón, rezando porque las lágrimas no vengan ahora y diluyan todos mis recuerdos.

Y es que a falta de nuevas llamas, me refugio en las cenizas de aquellos cigarros que mis labios no llegaron a tocar.

3 comentarios:

May dijo...

Si dices q el cenicero es tu corazón, quizás sea hora de limpiarlo y dejarlo bien bonito.
Habrá algunas partes q no se puedan limpiar, q serán esos recuerdos q no deberás olvidar.
Cuidate leti, besos!

Luis Cano Ruiz dijo...

Triste reflexión que , sin embargo, puede arreglarse con un paseo por el lavavajillas.

"Si el amor te da la espalda, tócale el culo"

Anónimo dijo...

A menudo,la fortuna nos hace pagar muy caro lo que creemos que nos ha regalado.