viernes, 21 de noviembre de 2008

Pasando

Pasando.

De todo y de todos.

Con un corazón inerte.

Sólo estoy esperando a la gran alegría que me haga volver a vivir. A esa sonrisa que dure semanas en mi cara. A ese soplo de vida que vuelva a prender las llamas de mi corazón.

Esperando.

Porque aunque parezca ausente, sigo aquí. Sin conocerte. Sin saber cómo eres. Pero sabiendo que un día llegarás. Esperándote. Hasta que mi corazón muera con su último latido.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué cosa más bonita...
Todos los días te dan alegrías, el problema es que no nos damos cuenta, porque esperamos otras cosas.
Por supuesto, esa llama se enciende sin querer, no desesperes, ya que el boton de on se encederá demasiado tarde. No borres nunca esa sonrisa, ehhh!!
No eres la única que espera, aunque lo mio sea inútilmente...

Besines!!!

Luis Cano Ruiz dijo...

Hay que dejar de esperar y comenzar a buscar. Dejar de pasar de todo y menos de todos. Hacer -siempre hay algo que hacer- algo más que esperar una alegría que no llegará si no la buscas.

En el fondo creo que la vida no la pasamos esperando, sino buscando.

Buen fin de semana.

May dijo...

Q bonito Leti, pero eso, no la esperes, búscala...

Unknown dijo...

Pues yo creo que el amor no se busca. Se encuentra.

Si lo buscas, te frustrarás cada día que pase y no lo encuentres. Si te empeñas en buscarlo, puede que te lances a por cualquier cosina reluciente que veas y que parezca el oro que buscas, pero sea de pega y te termines llevando un chasco.

Quizás le conozcas ya. Y cuando menos te lo esperas, y como menos te lo esperas...

Suena a ristra de frases tópicas. A mí también me lo parecían hace apenas unos meses.

En esto no hay que desesperarse. A veces hay que pararse a pensar y darse cuenta de que la vida no es como las películas, en las que el prota lo deja con su novia o sufre un desamor y dos escenas después ya conoce a la mujer de su vida, con la que se casa al final de la peli.

Te puedes tirar meses y meses, o años, y no llega. Pero termina llegando, un día, de repente, sin esperarlo, o de quien no esperas.

Te lo digo por experiencia.

PD: por cierto, me gusta cuando escribes este tipo de entradas. No conocía tu lado sentimental. :-)